18 meses de cautiverio. De Annual a Monte Arruit



18 meses de cautiverio. De Annual a Monte Arruit, Eduardo Pérez Ortiz. 
Editorial Interfolio, 2010

Hace ya cuatro años se reeditó un libro extraordinario: 18 meses de cautiverio. De Annual a Monte Arruit,  de Eduardo Pérez Ortiz. La edición la llevó a cabo Jesús María Sánchez para la editorial Interfolio, dentro de su estupenda colección Leer y viajar clásico.
El libro está correctamente editado, sin pretensiones ni excesos, y con algunas fotografías extraordinarias. Podrían ser algunas más y, también, algunos mapas más.
Eduardo Pérez Ortiz fue un militar culto y comprometido con España. Participó en la guerra de Cuba y en las guerras del Protectorado de Marruecos. Retirado en el año 1920 de la vida militar tras su cautiverio, decide entrar en política. Se presenta y gana las elecciones para la alcaldía de Ceuta en el año 1921 por la coalición socialista-republicana; pero, cansado pronto de la vida política, dimite en el 1922. En el 1936 es detenido y tiene que ver como su hijo es fusilado ignominiosamente en el 37. Muere en el año 1954.
Eduardo Pérez Ortiz narra el desastre de Annual, la defensa y terribles sucesos de Monte Arruit, la desesperación por el abandono de los supervivientes por parte de las autoridades militares y civiles españolas durante un terrible cautiverio de dieciocho meses en manos de los rifeños.
La historia de la literatura española no es muy amante de recoger libros de este género autobiográfico, gusta más  de centrarse en la lírica y la novela. En los siglos XVI y XVII las autobiografías de soldados y viajeros españoles son numerosísimas, pero en los manuales de historia de la literatura nunca aparecen: como el libro que nos ocupa.
Es un libro apasionante e imprescindible para entender el desastre de Annual y las causas que lo provocaron. Puede sorprender que un libro en apariencia de tema militar quepa en una colección de viajes, pero es que también es un maravilloso libro de aventuras, y un retrato de la  sociedad y la cultura bereber. El estilo peca de ser un poco seco y cortante, a veces parece un informe castrense; pero nunca llega a aburrir.
En resumen, un libro imprescindible, entretenido, sorprendente y muy recomendable para entender un episodio tan importante de nuestra historia. Mi humilde agradecimiento a esta pequeña editorial por su reedición.

F. Javier Íñiguez de Onzoño Martín


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