El hereje, Miguel Delibes
Editorial Austral
Premio Nacional de Narrativa 1999
EL HEREJE
Y
LA INTOLERANCIA RELIGIOSA
Se trata de la última novela de Miguel Delibes, famoso escritor de posguerra. Narra la historia de Cipriano Salcedo desde sus primeros años hasta su muerte. Cipriano fue un niño huérfano desde su nacimiento, pues su madre murió al dar a luz y, además, vivió sin el amor de su padre, pues éste le internó en un colegio de niños expósitos. El único cariño que tuvo en estos primeros años fue el de Minervina, su nodriza, de quien llegará incluso a enamorarse. De hecho, será la única que le acompañará hasta el final de sus días.
Pasados unos años, Cipriano comenzó a trabajar en la industria lanera y se casó con Teodomira, hija de Segundo Centeno, quien dirigía los rebaños del Páramo. Convertido en un próspero comerciante, se puso en contacto con las corrientes protestantes que empezaban a introducirse en la Península, pues Valladolid era un foco importante de ellas. Por ejemplo, con la familia Cazalla, quien le mostró esta nueva fe, que Cipriano acabó profesando. Viajó a Alemania donde se puso en contacto con Melanchton y Lutero, principales exponentes del Protestantismo y donde podía conseguir libros prohibidos de las nuevas corrientes religiosas. Sin embargo, a pesar de todas las precauciones del grupo y de su prudencia a la hora de realizar reuniones, la Inquisición les acabó deteniendo y les condenó a muerte en la hoguera como herejes si no renegaban de su nueva religión y reconocían que la única religión verdadera era la católica, apostólica y romana.
Entre los temas de esta novela, destaca la intransigencia religiosa de la época; Miguel Delibes hace un canto apasionado a favor de la tolerancia y de la libertad de conciencia, mediante la crítica de la Inquisición. Cipriano, aunque ha fracasado en muchos aspectos, muere como un héroe, puesto que es obligado a llevar un sambenito y a morir en la hoguera por no confesar y acatar la “única y verdadera” religión, la católico-romana. El autor describe el horror del auto de fe, así como la violencia y el odio del pueblo contra el pobre Cipriano, como muestra de la intolerancia y de la falta de libertad religiosa, reinantes en esa época. Lejos de gritar en la hoguera, Cipriano muere en silencio, algo que impresiona al pueblo que enmudece conmocionado.
La religión católica y el protestantismo son el hilo conductor de la novela, pues se muestran como dos doctrinas capaces de dividir a un pueblo. En mi opinión, Delibes muestra el peligro de una religión cuando se pretende que sea la única, pues el afán de extenderla puede provocar hechos tan atroces como los que describe la novela con el auto de fe. También reflexiona sobre cómo a través de los libros se puede alcanzar el conocimiento; sin embargo, en la época, la Inquisición prohíbe el acceso a los textos de Lutero ya que los considera demasiado peligrosos pues la gente podría a través de ellos empatizar con las nuevas doctrinas y podría producirse el cisma de la Iglesia.
Cipriano no comete otro delito que pensar de forma diferente al sector dominante: la Iglesia romana. Por ello, podemos considerar su muerte como una defensa simbólica de la libertad de conciencia y de expresión, ya que en ningún momento reniega de sus ideas y acata las consecuencias, yéndose a la tumba con sus valores e ideales intactos.
En definitiva, Delibes se sirve de esta historia para dar una lección moral contra la intolerancia en nombre de la fe y, por ello, a pesar de ser una novela histórica, trata también temas vigentes en la actualidad. Hoy en día esta intransigencia religiosa sigue presente en algunas religiones, con grupos radicales que se corresponderían con la Inquisición española del siglo XVI, que creen que su religión es la única y verdadera y que, para extenderla por todo el mundo, se ven obligados a morir mártires y a acabar con el resto de las religiones, pues para ellos son solo pseudoreligiones. Este lavado de cerebro actual no se diferencia mucho del que sufría el pueblo español que disfrutaba con los autos de fe, viendo cómo condenaban a arder en la hoguera a los supuestos herejes. La intransigencia religiosa es muy peligrosa puesto que ocasiona miles de muertes y elimina por completo la libertad ya no sólo de elección de religión sino de elección de creencia. Este adoctrinamiento, llevado a cabo por unos cuantos, genera miedo, injusticia, muertes, guerras... En respuesta a estas situaciones surge El Hereje de Miguel Delibes, para combatir y reflejar esta falta de libertad.
Nerea Hernández Egido
2º Bach. B
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